El informe PISA 2023, que evalúa a los alumnos de 15 años de 79 países, ha vuelto a colocar a España en la cola de la tabla en matemáticas. Los resultados son los peores de la historia del país, y ponen de manifiesto la grave crisis educativa que atraviesa España.
El informe PISA mide el rendimiento de los alumnos en tres áreas: matemáticas, lectura y ciencias. En matemáticas, los alumnos españoles obtuvieron una puntuación media de 493 puntos, muy por debajo de la media de la OCDE, que se sitúa en 508 puntos. España es el único país de la OCDE que ha empeorado su rendimiento en matemáticas en las últimas tres evaluaciones PISA.
Los resultados del informe PISA son una alerta roja para la educación española. Demuestran que el sistema educativo no está preparando a los alumnos para las necesidades del siglo XXI. Los alumnos españoles tienen dificultades para resolver problemas matemáticos complejos, para aplicar los conocimientos matemáticos a la vida real y para trabajar de forma colaborativa.
La Ley Orgánica de Educación (LOMLOE), conocida como Ley Celáa, que entró en vigor en 2022, ha sido criticada por su enfoque excesivamente ideológico. Es importante señalar que la Ley Celáa no es la única causa de la crisis educativa española.
La falta de inversión en educación: España es uno de los países de la OCDE que menos invierte en educación.
La alta tasa de fracaso escolar: En España, el 25% de los alumnos abandona la escuela sin completar la educación obligatoria.
La desigualdad educativa: Los alumnos de entornos socioeconómicos desfavorecidos tienen menos oportunidades de éxito educativo.