Al menos 45 personas resultaron heridas, cinco de ellas con quemaduras de gravedad, en la explosión de un almacén de una planta industrial situada en Sergei Posad, localidad al nordeste de Moscú. De acuerdo con información proporcionada por el Kyiv Post, la instalación en cuestión mantenía un contrato con el Ministerio de Defensa ruso para la fabricación de componentes ópticos de importancia estratégica destinados al Ejército, tales como visores, cámaras termográficas y telémetros láser.
A raíz del estallido, seis individuos se encuentran actualmente en unidades de cuidados intensivos, siendo cinco de ellos afectados con quemaduras que cubren la totalidad de su cuerpo. De forma simultánea, equipos de rescate han logrado rescatar a al menos tres personas de entre los escombros, hallándose en estado delicado, según reportes emitidos por la agencia de noticias TASS. El gobernador de la región de Moscú, Andrei Vorobiov, a través de su canal oficial en Telegram, señaló la posibilidad de que existan cinco personas adicionales desaparecidas a raíz del incidente. En relación al resto de los heridos, un total de 17 han sido trasladados a centros hospitalarios para recibir atención médica a causa de lesiones de menor gravedad.
Según declaraciones del representante distrital Dimitri Akulov, comunicadas a través de su perfil en Telegram, la explosión se desencadenó alrededor de las 10:40 horas, hora local, en las proximidades de la sala de calderas. Ante este evento, los servicios de emergencia procedieron con la evacuación de edificaciones circundantes. Aunque las investigaciones preliminares sugieren que la explosión pudo haber sido ocasionada por un “factor humano”, hasta el momento las causas específicas del incidente permanecen desconocidas. Se estima que al menos 20 inmuebles han resultado afectados, principalmente a causa de la rotura de ventanas, entre los cuales figuran instalaciones deportivas y varias escuelas.
El presidente del Comité de la Duma Estatal sobre Construcción y Vivienda y Servicios Públicos, Sergei Pajomov, compartió a través de su cuenta en Telegram que la causa de la explosión podría estar relacionada con una “supuesta violación” en el sistema de seguridad de la planta. Con base en este escenario, las autoridades pertinentes han dado inicio a una investigación bajo el artículo 217 del Código Penal ruso. La compañía PiroRoss, encargada del almacén en cuestión y actualmente en proceso de quiebra, ha sido mencionada en informes de la agencia de noticias Interfax.
Resulta destacable que la explosión tuvo lugar en el mismo día en que se anunció en Moscú el derribo de dos drones de combate ucranianos, dirigidos hacia la capital rusa. El alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, comunicó que uno de los drones fue abatido en la localidad de Domodedovo, ubicada al sur de la ciudad, mientras que el segundo logró ser interceptado en la zona occidental.
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