El PSOE y la coalición Sumar han oficializado un acuerdo programático este martes para la formación de un Gobierno de coalición, en caso de que Pedro Sánchez, actual jefe del Ejecutivo en funciones, logre su investidura. Este acuerdo, que abarca una amplia gama de medidas progresistas, ha sido anunciado en un comunicado conjunto emitido por ambas partes, consolidando un proceso que tuvo lugar tras una reunión sostenida el lunes entre Sánchez y la líder de Sumar, Yolanda Díaz, quien también ocupa el cargo de vicepresidenta segunda del Gobierno.
Este pacto, concebido para una legislatura de cuatro años, tiene la ambiciosa visión de permitir que España continúe su crecimiento de manera sostenible, con un enfoque en la creación de empleo de calidad y en la implementación de políticas basadas en la justicia social y ambiental, así como en la expansión de derechos, logros feministas y libertades.
Entre las medidas más destacadas se incluye el objetivo de alcanzar el pleno empleo en la próxima legislatura, y la reducción de la jornada laboral sin reducción salarial, junto con la implementación inmediata de un plan de choque contra el desempleo juvenil y el fortalecimiento del sistema de salud público. Además, se contempla el aumento del parque público de vivienda, con el objetivo de que alcance el 20 % del parque total, la revisión de los objetivos establecidos en la Ley de Cambio Climático, la ampliación de permisos retribuidos por nacimiento, y la universalización de la educación desde los 0 a los 3 años, garantizando que el acceso a la educación pública para niños y niñas de dos años será accesible para todos al final de la legislatura. También se prevé una reforma fiscal que busque la justicia y haga que la banca y las grandes compañías energéticas contribuyan al gasto público.
Sumar ha comunicado que este acuerdo también aborda la derogación de la llamada “ley mordaza,” la reforma de la financiación territorial, el desarrollo de una ley de vivienda para regular los alquileres, el aumento del salario mínimo para evitar la pérdida de poder adquisitivo, y una ley de cuidados.
Ambos partidos han destacado que las negociaciones se han estado llevando a cabo desde julio y que han alcanzado este acuerdo antes del plazo que se habían autoimpuesto. Con este acuerdo, creen que están respondiendo al claro mensaje que la ciudadanía envió en las elecciones del 23 de julio: un rechazo a un Gobierno de la derecha y ultraderecha en España y un mandato para seguir avanzando en derechos y libertades.
El PSOE y Sumar tenían como objetivo finalizar el acuerdo antes de que concluyera octubre, lo que llevó a acelerar las negociaciones debido a las apretadas agendas de Sánchez y Díaz.
La vicepresidenta, Yolanda Díaz, viajará a Bruselas esta misma tarde para participar en un evento de partido previo a su presencia en la Cumbre Social Tripartita europea, donde coincidirá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Sánchez permanecerá en la capital belga hasta el viernes para participar en el Consejo Europeo de otoño.
Es importante destacar que el contenido del acuerdo es puramente programático y no aborda cuestiones como la estructura del nuevo Ejecutivo o la asignación de carteras entre los socios, asuntos que serán abordados en una etapa posterior. Además, tanto los órganos del PSOE como sus militantes deberán avalar el pacto alcanzado con Sumar.
Desde antes de las elecciones, tanto Sánchez como Díaz habían expresado su interés en reeditar el Gobierno de coalición. Ambos líderes se reunieron en el Congreso el pasado 4 de octubre en medio de la ronda de contactos para la investidura de Sánchez, la cual se llevó a cabo después de que el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, no lograra la investidura.
La fase de negociación ha concluido, y ahora Sánchez debe asegurarse del respaldo de otros partidos para su investidura, con el principal obstáculo siendo el respaldo de los independentistas catalanes. El tema de la amnistía sigue siendo un punto central en estas conversaciones. A pesar de las dificultades, tanto en Moncloa como en Ferraz, mantienen un optimismo moderado con respecto a la investidura de Sánchez.
El plazo límite para que Sánchez sea investido es el 27 de noviembre. En caso de no lograrlo, se convocarían elecciones generales para el 14 de enero.
El Partido Popular, por su parte, ha ironizado sobre la “sorpresa” que les ha causado el acuerdo entre el PSOE y Sumar. Consideran que este acuerdo ha superado un debate que ha mantenido en vilo a los españoles en las últimas semanas. Además, destacan la capacidad negociadora de Yolanda Díaz y su disposición a abandonar la vicepresidencia si fuera necesario para mantener sus principios.
Por otro lado, Alberto Garzón, coordinador general de Izquierda Unida (IU) y ministro de Consumo en funciones, ha calificado este acuerdo como un paso importante y necesario para revalidar la coalición y avanzar en la protección de la clase trabajadora y los derechos humanos.
Los sindicatos también han reaccionado al anuncio de la reducción de la jornada laboral, considerándolo positivo. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha señalado que su sindicato sigue apuntando a las 35 horas semanales como objetivo, y considera que es esencial iniciar un proceso para reducir la jornada máxima, que ha permanecido en 40 horas durante 40 años. Por su parte, el secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha elogiado el acuerdo pero ha pedido prudencia