Un niño de menos de dos años ha muerto ahogado este sábado tras presuntamente sufrir un resbalón en la bañera de su domicilio familiar en Vícar (Almería), a pesar de que ha sido trasladado a un centro de salud para intentar reanimarlo.
Fuentes de la Comandancia de Almería han confirmado la muerte del menor que, según han apuntado a EFE fuentes municipales, habría cumplido dos años el próximo mes de septiembre, aunque la Guardia Civil no ha entrado en otro tipo de detalles.
No obstante, las fuentes municipales señalan que los primeros datos apuntan a que el niño habría sufrido un resbalón en la bañera en su casa de la carretera del Sector 4, en la Puebla de Vícar, se habría dado un golpe y habría sufrido un ahogamiento que lo habría hecho entrar en parada cardíaca.
Tal y como adelanta el periódico Diario de Almería en su edición digital, ha sido el padre del menor el que lo ha trasladado en su coche al centro de salud de la Puebla de Vícar, donde se han practicado maniobras de reanimación cardiorrespiratoria sin lograr reanimarlo.
Las citadas fuentes han señalado que la Guardia Civil se ha hecho cargo de la instrucción del suceso, indicando que el pequeño, de origen magrebí, se llamaba Bilal K. y tiene dos hermanos de 5 y 7 años, mientras que su progenitor tiene 41 años y la madre 39.