VOX ha presentado una denuncia ante la Audiencia Nacional en respuesta a la difusión de un cartel que ha causado polémica durante las festividades de Bilbao. En dicho cartel se muestra la imagen de Santiago Abascal, líder de VOX, acompañada de una representación gráfica de un charco de sangre, que simboliza un posible atentado contra su persona. Los cargos presentados abarcan los delitos de amenazas, odio y apología del terrorismo, según lo estipulado en el Código Penal.
La denuncia, respaldada por la Vicesecretaria Nacional Jurídica de VOX, argumenta que la difusión del cartel y la organización del acto asociado fomentan la violencia y justifican su uso como medio de diferencia e ideología. Se establece que Santiago Abascal ha sido un objetivo constante del terrorismo de ETA a lo largo de su vida, lo que convierte esta situación en un caso de apología del terrorismo.
La formación política liderada por Abascal sostiene que la utilización del cartel con fines festivos no puede ser amparada bajo la libertad de expresión, ya que ha traspasado los límites aceptables. Se argumenta que la comunidad, en especial los habitantes de Bilbao y Vizcaya, asocian la imagen del líder político con la amenaza de un posible atentado, lo que incita a un ambiente de odio y violencia.
El cartel que representa a Santiago Abascal siendo atacado incita, promueve y fomenta el odio hacia su persona, así como a todos los simpatizantes y votantes de VOX. Esta incitación al odio se fundamenta en motivos ideológicos y políticos, lo cual infringe la dignidad y los principios de igualdad y no discriminación, amparados por la Constitución Española y la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Adicionalmente, la incitación al odio que llega al punto de instar al asesinato, como se ilustra en el cartel, es un delito de alto riesgo, al fomentar una acción violenta de tal gravedad que podría incitar a la realización efectiva del acto. Este tipo de representación recuerda al método amenazante utilizado históricamente por la banda terrorista ETA, lo que refleja un respaldo inaceptable a acciones violentas y constituye un delito de enaltecimiento y apología del terrorismo.
La denuncia interpuesta también solicita a los órganos judiciales que busquen la colaboración del Ayuntamiento de Bilbao para identificar a los organizadores del acto en cuestión, con el fin de enfrentar los cargos que se les imputan. Asimismo, se solicita la suspensión del evento convocado para el 24 de agosto.