El Ministerio de Sanidad ha hecho un llamamiento a la responsabilidad y acudir al médico a quienes tengan síntomas compatibles con la viruela del mono, que suma 4.577 casos tras ser registrados otros 279, y ha pedido a las comunidades rapidez en poner las vacunas, de las que España recibirá 7.000 más esta semana.
El Gobierno, ha dicho la ministra Carolina Darias desde Gijón, está intentando conseguir más dosis de Imvanex, cuya producción es “limitada”, pero ha dejado claro que “tan importante es conseguir vacunas como que se inoculen por parte de las comunidades”. “Soy consciente del esfuerzo, pero pido mantenerlo para seguir vacunando porque es la manera de seguir salvando vidas“, ha añadido.
En nuestro país, el plan de vacunación contra la viruela del mono contempla la profilaxis preexposición en personas con prácticas de alto riesgo y la posexposición de contactos estrechos, sobre todo aquellos con alto riesgo de enfermedad grave como son niños, embarazadas e inmunodeprimidos, además de personal sanitario y de laboratorio que hayan tenido alguna incidencia en el uso de su EPI.
Por ahora se han distribuido a demanda de las comunidades las 5.300 primeras dosis de las 11.400 que España adquirió a través de la Hera, la Autoridad Europea de Preparación y Respuesta ante Emergencias Sanitarias, además de otras 200 que compró a un tercer Estado. A finales de semana, ha dicho Darias, llegarán otras 7.000.
España, con 4.577 casos, sigue siendo el segundo país del mundo -tras Estados Unidos- y el primero de Europa más afectado por este brote que estalló a primeros de mayo fuera del área endémica de África central y Occidental y que ha llevado al director general de la OMS a declarar la viruela del mono emergencia de salud pública internacional.
De acuerdo con la última actualización de los datos que ha publicado este martes el Ministerio de Sanidad, Madrid es la comunidad con la cifra más alta (1.766), por delante de Cataluña (1.463) y, mucho más alejada, Andalucía (545); Comunidad Valenciana (236); País Vasco (115); Canarias (107) y Baleares (89).Muy por detrás están Aragón (45); Galicia (42); Asturias (41); Castilla y León (33); Castilla-La Mancha (23); Murcia (23); Extremadura (20); Cantabria (15); Navarra (11) y La Rioja, con 3.
En esta ocasión, Sanidad no especifica cuántos de los contagiados han requerido hospitalización ni sus características, que detallará en una nueva actualización el próximo viernes. Hasta el pasado sábado, fecha del último informe, que contabilizó 4.298 positivos confirmados, 120 habían sido ingresados (3,2%).
La cifra de fallecidos se mantiene en dos, informan a EFE desde este departamento. Se trata de dos hombres jóvenes, uno de la Comunidad Valenciana, del que se siguen investigando los motivos exactos de la muerte, aunque los indicios apuntan a una encefalitis asociada a la infección. Y otro un chico de 31 años en Córdoba, del que también se están analizando muestras para determinar si la causa del fallecimiento es meningoencefalitis u otra patología. En todo el mundo han muerto 8 personas.
En este contexto, la ministra ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de quienes tengan síntomas para que acudan al médico de forma inmediata, de manera que “nadie se quede sin ver a un facultativo por razones de estigma”. A la espera de que actualicen las características de los casos el viernes, el síntoma más común entre los pacientes fue el exantema anogenital (60,3 %), seguido de fiebre (56,6 %), exantema en otras localizaciones (no anogenital ni oral-bucal) (52,8 %) y linfadenopatías (52,2%).
Como en el resto de países, la mayoría de casos se han dado en población HSH (hombres que tienen sexo con hombres), principalmente en el contexto de las relaciones sexuales de alto riesgo, que están detrás de más del 82 % de los positivos.
Sin embargo, recuerda Sanidad, “si dicha transmisión sostenida no es controlada de manera óptima, hay un riesgo importante de que ésta se desplace a otros grupos poblacionales por el mismo mecanismo de transmisión, siendo posible la afectación de otros grupos, y la aparición de casos graves en poblaciones vulnerables”.
El protocolo de actuación frente a la viruela del mono recomienda a los infectados que se aíslen en una habitación separada de otros convivientes hasta que desaparezcan las lesiones y eviten el contacto y las relaciones sexuales; además, durante ese periodo deberán usar mascarilla, tener sus propios utensilios, no salir salvo para ir al médico, evitando el transporte público y no tener contacto con animales.
A principios de este mes, Sanidad lo endureció al incluir otros consejos a los contagiados, como que usen preservativo en las 12 semanas posteriores al fin del aislamiento o si han sido diagnosticados fuera de su lugar de residencia, no regresar hasta haberlo finalizado. También pide a los locales donde se practica sexo en grupo, como saunas o cuartos oscuros, que extremen la higiene.
Por el contrario, los contactos estrechos no deben hacer cuarentena, pero sí medirse la temperatura una vez al día durante 21 días tras la exposición. Eso sí, deberán extremar las precauciones y reducir todo lo posible las interacciones sociales, utilizando de forma constante la mascarilla y absteniéndose de mantener contactos sexuales durante el periodo de seguimiento.