Vuelve a ocurrir. Vuelve a ocurrir aquello que pasaba en 1936, la censura y la represión a los medios de comunicación a los periodistas. Puede que se lo crean, y que piensen que ellos mismos pueden censurar la libertad de expresión, la libertad y el derecho de informar, pero solo nos dan más ganas de seguir trabajando, de seguir denunciando esta censura, estos insultos y amenazas.
Diario de España molesta, sí. ¿Por qué molesta si somos un medio ‘pequeño’ comparado con otros? Porque de no ser así, no habría recibido una amenaza y unos insultos en varias ocasiones: una de manera física, cuando el 11 de septiembre -día de la Diada- íbamos a emitir en directo para nuestro YouTube la manifestación, y otra, este mismo viernes, cuando pasadas las 22:00h de la noche, recibo un correo electrónico a mi cuenta corporativa del periódico y veo un correo con el asunto «Fill de puta».
«Espero no verte nunca por Barcelona. Y si te veo no tendré compasión en ti. Hijo de puta. Nazi. Fascista», contiene este correo electrónico. En mi opinión, se debe al acto que llevaremos en Barcelona el próximo 23 de diciembre para presentar Diario de España y hablar de nuestros objetivos. Un lugar elegido por los lectores a través de una encuesta pública en Twitter.
Como decía George Orwell, escritor y periodista británico, «libertad de expresión es decir lo que la gente no quiere oír”. Y fíjense la razón que llevaba, que a día de hoy sigue ocurriendo. Es impensable una sociedad sin medios y periodistas críticos, que denuncien las acciones políticas y gubernamentales, y da igual quien gobierne.
Si con ese correo electrónico se pretendía que nos replanteásemos acudir a Barcelona a realizar nuestro acto o a cesar nuestro trabajo, lo llevan claro, allí nos tendrán el 23 de diciembre, y los estaremos esperando. ¿Te unes?