La moción de censura debatida por Vox, el Gobierno y los grupos parlamentarios en el Congreso este martes ha sido uno de los temas más candentes de la actualidad política. En este contexto, el discurso de Inés Arrimadas, líder de Ciudadanos, ha destacado por su brillantez, su fuerza y su valentía, convirtiéndose en uno de los momentos más memorables de la jornada.
El titular de nuestra editorial no puede ser otro que «De alas y motivos». Y es que la líder de Ciudadanos, que desde hace tiempo viene demostrando una gran solidez en su discurso y una firmeza inquebrantable en sus principios, se ha alzado como la gran protagonista de la moción de censura.
Desde el primer momento, Arrimadas ha dejado claro que la moción de censura de Vox no era más que un intento fallido de aprovechar la coyuntura política para ganar visibilidad y tratar de erosionar al Gobierno de Pedro Sánchez. Como ella misma ha dicho, «la moción de censura no es contra Sánchez, sino a favor de Sánchez».
Pero, a pesar de esta realidad, Arrimadas ha aprovechado su intervención para poner sobre la mesa algunos de los temas que realmente importan a los españoles, como la necesidad de una reforma laboral, una educación de calidad, una sanidad eficiente y una justicia independiente. Todo ello, con un tono claro, directo y sin ambages.
Arrimadas ha sido especialmente crítica con Vox, a quien ha acusado de estar más preocupado por la confrontación y la polarización que por el bienestar de los ciudadanos. Y ha dejado claro que Ciudadanos seguirá trabajando por un proyecto de centro, moderado y reformista, que busque siempre el bien común.
En definitiva, el discurso de Inés Arrimadas ha sido una muestra de liderazgo, de convicción y de compromiso con los españoles. Un discurso que debería servir de ejemplo para el resto de partidos políticos y que ha demostrado, una vez más, que Ciudadanos es una formación sólida, coherente y comprometida con el futuro de España.
Sin embargo, a pesar de la valentía y la firmeza de Arrimadas, no podemos obviar que la moción de censura presentada por Vox ha supuesto una oportunidad perdida para la oposición. En lugar de aprovechar para presentar un proyecto sólido y coherente para España, han optado por una estrategia de confrontación y polarización que solo ha servido para dar alas a Pedro Sánchez.
Como han señalado varios medios de comunicación, la moción de censura ha supuesto un balón de oxígeno para el Gobierno de Pedro Sánchez, que ha aprovechado la ocasión para reforzar su posición y victimizarse frente a la oposición. En este sentido, cabe destacar que la moción de censura ha dado aire al Gobierno de Sánchez y que ha permitido al presidente ganar tiempo y reforzar su posición.
No podemos olvidarnos tampoco de los motivos que han llevado a presentar esa moción. Entre el largo listado, incluimos: mesa de negociación, indultos a golpistas y Juana Rivas, ley del ‘solo sí es sí’ y el excarcelamiento de más de 750 violadores, quitar competencias a la Guardia Civil de Navarra, insultar a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado llamándoles «piolines», acercamiento de presos etarras al País Vasco, reforma del Código Penal en los delitos de sedición y malversación, querer abolir la prostitución, pero proteger a ‘Tito Berni’ y al resto de diputados, reunirse en secreto con líderes de la dictadura de Maduro, entre otros asuntos en un largo etcétera.
Podrán sobrar los motivos, pero está claro, que esta moción solo da alas a Sánchez para aparecer en televisión y que Yolanda Díaz realice un acto de precampaña desde la Tribuna del Congreso.