La Ley de Vivienda que se aprobará esta semana ante el beneplácito de ERC y Bildu, ha sido presentada por los partidos del Gobierno como una medida necesaria para hacer frente a la crisis de vivienda que atraviesa nuestra sociedad. Sin embargo, no podemos ignorar el hecho de que esta ley es más bien una maniobra impulsada por puro electoralismo.
El gobierno sabe muy bien que la vivienda es un tema que preocupa mucho a los ciudadanos y que es una de las principales demandas de la sociedad. Por eso, ha utilizado esta preocupación para presentar una ley que, en realidad, no aborda de manera efectiva los problemas de vivienda que existen.
La ley de vivienda tiene como objetivo principal regular el mercado de alquiler, pero lo hace de una manera que sólo va a generar más problemas. Por ejemplo, se establece un límite a las subidas del alquiler, lo que puede sonar bien en teoría, pero en la práctica lo que va a provocar es que los propietarios se deshagan de sus propiedades y que no se construyan nuevas viviendas para alquilar.
Además, la ley de vivienda no tiene en cuenta las particularidades de cada zona, ya que establece unos criterios generales para toda España. Esto va a provocar que en algunas zonas los precios sean aún más altos, mientras que en otras los propietarios no quieran alquilar sus viviendas debido a las restricciones impuestas por la ley.
Por si fuera poco, la ley de vivienda no incluye medidas para fomentar la construcción de nuevas viviendas. Esto es algo fundamental, ya que la falta de vivienda no se soluciona simplemente regulando el mercado de alquiler. Es necesario que se construyan nuevas viviendas para cubrir la demanda existente.
En conclusión, la ley de vivienda es una medida impulsada por puro electoralismo. El gobierno sabe que la vivienda es un tema que preocupa mucho a la sociedad, y ha utilizado esta preocupación para presentar una ley que en realidad no soluciona los problemas de vivienda que existen en nuestro país. Es necesario que se tomen medidas efectivas para solucionar la crisis de vivienda, y la ley de vivienda no es una de ellas.
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