El miércoles 23 de noviembre asistimos atónitos a la asquerosa retroalimentación de los extremos populistas. Era una jornada en la cual la ministra Irene Montero iba a salir mal parada, precisamente por la misma violencia política que ella está ejerciendo contra el colectivo de jueces, llamándoles machistas y fascistas con toga. Por cierto, un colectivo compuesto por un 54% de mujeres a las que también llama machistas. Entonces llegó VOX y salvó a la ministra.
La diputada de Vox, Carla Toscano, subía a la tribuna del Congreso este pasado miércoles y empezaba su intervención. En ese preciso instante, Irene Montero era un cadáver político y tenía muy pocos apoyos. Solo algunos de Podemos seguían sosteniendo el relato de la ministra. La mayoría de la cámara estaba escandalizada por los ataques podemitas a los jueces, y también a las juezas. Muchos pedían su dimisión o que Sánchez la cesase. Pero Carla empezaba a abrir su boca y a leer lo que tenía escrito, con poca interpretación del texto, que también hay que decirlo. En esa intervención estaban incluidas algunas verdades insalvables, otras medias verdades y ciertas mentiras en un relato dirigido para arengar a sus más fieles. En mitad de la intervención dijo “…. cuando el único mérito que tiene usted es haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias”.
Es entonces cuando asistimos a la resurrección del cadáver. Una diputada de extrema derecha había atacado directamente a una ministra de extrema izquierda utilizando su relación marital y al padre de sus tres hijos. La inmensa mayoría de las voces que se habían puesto en contra de la ministra por lo dicho en la última semana, ahora estaban a favor. Las palabras de VOX fueron el mejor argumento de Podemos. Ahora la ministra se hace la víctima, dando entrevistas diciendo que ella ya viene llorada de casa. Ahora ya nadie pide la dimisión de Irene Montero. Ahora ya ningún medio actualiza los datos de rebajas de penas y excarcelaciones de delincuentes sexuales. Ahora Irene está más viva que nunca. Y todo gracias a VOX.
Nada es lo que parece.
Y muchos dirán ¡¡¡Qué torpe ha sido VOX!!! Ni mucho menos. VOX y Podemos saben muy bien a qué juegan. Juegan a un juego perverso y ya conocido desde que existen los medios de comunicación escritos. El juego de la retroalimentación de los extremos opuestos. En este juego la dinámica se desarrolla cuando dos partidos contrarios se dedican arengar a los propios mientras se provoca el miedo a los contrarios. Muchos creerán que lo importante es la arenga, pero también es equivocado, apenas da votos, lo importante es el miedo. Ante una acción que atemoriza a los ajenos, el extremo opuesto, responde con una reacción que atemoriza a los propios.
Extienden el miedo mutuamente. Miedo a los menas, miedo a los maltratadores machistas, miedo a los que saltan la valla, miedo a los racistas, miedo al integrismo islámico, miedo a los anti islam, miedo a los que vienen en el Open Arms, miedo a Salvini, miedo a la invasión de niños de Marruecos, miedo a los que no respetan los derechos de la infancia, miedo al caso de una feminista radical que tenía encerrado a su hijo, miedo a que los niños acaben en custodia de abusadores sexuales, miedo a que quiten la prisión permanente revisable a violadores asesinos, miedo a los violadores en manada, miedo la los violadores en manada de origen africano, miedo a que se emparejen el color de la piel y la delincuencia, miedo a los medios de comunicación que omiten la nacionalidad no española del delincuente, miedo a los medios de comunicación que señalan en el titular la nacionalidad no española del delincuente, miedo a las denuncias falsas de violación, miedo a los afirman veladamente que muchas de las denuncias de violación son falsas, miedo a una ley en proyecto que puede señalarte como violador cuando no lo eres, miedo a que siga habiendo violaciones a las que no se se las llama violación, miedo a una feminista radical que separa a los gallos “violadores” de las gallinas, miedo a que una mujer pierda la custodia de su hija, miedo porque esa mujer ha sido acusada de secuestro, miedo porque condenen a esa mujer, miedo porque esa mujer al final ha sido condenada por un tribunal en un estado de derecho, miedo a lo que pueda hacer el padre ahora con la custodia, miedo porque el gobierno quiere indultar a esa mujer, miedo por lo que pueda hacer esa mujer siendo libre, miedo porque un padre ha matado a sus hijas de manera cruel, miedo porque una madre también ha matado a un hijo, miedo porque otro hombre ha matado a otra mujer, miedo a la exhumación de un general franquista, miedo a los defensores de ese general que fue muy cruel, miedo por otra mujer que mata a su hija, miedo por otro asesinato machista, miedo por violadores con penas rebajadas, miedo a jueces machistas que incumplen la ley, miedo a leyes mal hechas por hembristas radicales, miedo, miedo, MIEDO, M I E D O, M I E D O.
¿No están ustedes ya hartos de que les impongan miedos?
Todo buen amante de la libertad sabe que no se puede ser libre si se tiene miedo.
Para ellos el fin justifica los miedos.
¿Ponía medios o miedos? vuelvanlo a leer… Si ponía miedos. El miedo es el medio para ellos. Y la pregunta legítima va sobre los fines. Normalmente las sociedades tiene dos polos minoritarios, que en condiciones de buena calidad de vida no hacen ningún ruido, pero que a medida que la calidad de vida empeora, empiezan a hacer más y más ruido. Pero ya he dicho que estos polos son minoritarios realmente. La gran inmensa mayoría de las personas se encuentran en el medio, algunos menos lejos de un polo que del otro, pero igualmente lejos de los dos. El fin es separar a la inmensa mayoría de la sociedad en 2 polos opuestos, para que una gran parte vote y apoye a un extremo, y otra parte vote y apoye al otro.
Esta táctica no solo la aprovechan los extremos populistas, también la aprovechan PP y PSOE en algunas ocasiones. Yo recuerdo a Alfonso Guerra en un mitin con una cartilla de racionamiento en la mano. Y un caso práctico y cercano de esto que acabo de explicar, son las elecciones autonómicas madrileñas del año pasado en 2021. Ayuso dijo a la sociedad madrileña que tenían que elegir entre socialismo o libertad. Al cabo de pocos días el PSOE reaccionó diciendo que teníamos que elegir entre fascismo o democracia. Al final la sociedad madrileña se movilizó más que nunca con una participación récord del 71,74%, y votó en un 94,94% en contra del socialismo o en contra del fascismo. El miedo partió a Madrid en 2 para alejarles del centro moderado y sensato.
¿Hacia dónde vamos?
Para saber hacia dónde vas, tienes que saber de dónde vienes, y si tienes conocimiento sobre otros que hayan venido de un lugar parecido y hayan recorrido un camino similar, podrás saber en qué lugar acabarás. En este sentido la experiencia de muchos países que partieron de gobiernos democráticos y empezaron a andar el camino de la polarización, los populismos y los extremos, nos dice que acabaron mal. Un bamboleo de izquierda a derecha o de derecha a izquierda que no acaba bien.
Cuando un partido que gobierna empieza a escorarse, como lo están haciendo PP y PSOE, en consonancia con una calidad de vida peor que hace pocas décadas y con mucha corrupción, la experiencia nos dice que el siguiente partido en gobernar será de sentido opuesto, más corrupto y más escorado que el anterior. Y además, si esta tendencia no se rompe, bajando el nivel de corrupción o negándose a una escora peligrosa, estas situaciones desencadenan en sistemas de gobierno autoritario que provocan una gran falta de calidad de vida, derechos y libertades.
A continuación unos ejemplos prácticos
- Reinado del terror en Francia ⇉ Napoleón Bonaparte todavía más terrorífico
- Zares en Rusia ⇉ Leninismo más corrupto y autoritario
- Derecha corrupta cubana ⇉ Castrismo más corrupto y autoritario
- Derecha corrupta venezolana ⇉ Chavismo más corrupto y autoritario
- Primeras presidencias radicales ⇉ Década infame
- Década infame ⇉ Peronismo
- Peronismo ⇉ antiperonismo
- Segunda República española con izquierda corrupta ⇉ 38 años de Franquismo
No es ninguna broma.
Los bandazos que pueden darse en una situación de degradación democrática y alta corrupción, son muy peligrosos y España lleva concatenando cambios de signo con degradación democrática desde 1985, que es cuando el PSOE mató a Montesquieu. Después de 13 años, mucha corrupción y dos ministros encarcelados, entró el PP. Después de muchos chanchullos en las autonomías, de hacerse la foto de las Azores, entrar en una guerra y tener un atentado fortísimo, entró el PSOE. Después del peor gobierno democrático hasta la fecha, de un clientelismo gigantesco y de llegar a tener un paro por encima del 25%, entró el PP. Después de que el PP volviera a reformar la ley de elección del CGPJ a favor de los partidos políticos, salieron decenas de casos de corrupción y el Partido Popular fue condenado a título lucrativo, y entró el PSOE con una moción de censura contra un bolso.
De la última legislatura y media de Pedro Sánchez, se acuerdan de casi todo, no hace falta recordar todas las mentiras, incumplimientos de promesas, todas las veces que este presidente ha hecho todo lo contrario a lo que dijo. La falta de transparencia es bestial, hay decisiones judiciales y fiscales totalmente incomprensibles cuando los supuestos delincuentes son de los partidos del bipartidismo. Los indultos, cambios de leyes y cesiones a delincuentes condenados en firme. Está más que claro que todas las generaciones viven peor que sus padres hace 25 años, TODAS. Y este es el caldo de cultivo perfecto para que los extremos populistas hagan su agosto.
Seguir permitiendo esta deriva, tanto por parte del bipartidismo y su corrupción altísima, como por parte de los extremos populistas, es una auténtica locura y un suicidio como sociedad y país. ¿Cuándo empezarán a sufrir el castigo de los votantes como ha pasado en Francia? ¿Cuándo abrirán los ojos los votantes españoles? ¿Hasta cuándo seguiremos alimentando a quienes nos usan como a pañuelos de papel? ¿Cuantas más generaciones tendrán que sufrir los efectos de esta degradación de nuestra democracia, nuestro estado de derecho y del bienestar? ¿Seremos capaces de parar esta deriva antes de que desencadene en una régimen autoritario?
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