Ya son 125 los heridos, entre ellos 25 miembros de las fuerzas de seguridad iraquíes, por los enfrentamientos en Bagdad entre la Policía y el Ejército del país contra los miles de simpatizantes del clérigo Muqtada al Sadr que este sábado han vuelto a tomar el Parlamento y a paralizar la capital iraquí en protesta por la candidatura del político chií proiraní Mohamed Shia al Sudani, rival del religioso, al cargo de primer ministro.
La mayor parte de los puentes de la capital y sus principales carreteras están paralizadas, mientras los partidarios del religioso han cercado las sedes del Consejo Judicial Federal, así como del Tribunal Supremo, mientras los líderes políticos del país, con el actual primer ministro, Mostafá al Kazemi, a la cabeza han llamado a la calma.
Ante la sentada dentro del Parlamento que han comenzado a protagonizar los manifestantes que han entrado de nuevo en la cámara, tras hacerlo por vez primera el miércoles, el presidente de la institución, Mohamed al Halbusi, ha pedido a los servicios de seguridad del hemiciclo que se abstengan de usar la violencia contra los partidarios de Al Sadr. “Al Halbusi ha ordenado a los servicios de protección del Parlamento que no atacara ni dañara a los manifestantes, y que no lleven armas dentro de la Cámara”, según una nota recogida por INA.
De igual modo, el presidente del Parlamento ha ordenado a la Secretaría General de la Cámara de Representantes que esté presente en la cámara para dialogar con los participantes en la sentada.
También la misión de Naciones Unidas en Irak, ha llamado a la “razón y a la sabiduría” para “prevenir más violencia” en beneficio de todos los iraquíes, según un comunicado recogido por la agencia oficial de noticias iraquí INA.
El clérigo Muqtada al Sadr, cuya coalición Sayirún ganó las legislativas del año pasado, lleva meses denunciando la incapacidad del resto de las fuerzas políticas para formar un nuevo gobierno, y ha asegurado que el grupo proiraní al que pertenece el candidato Al Sudani, Marco de Coordinación, gran derrotado en los comicios, no debería tener presencia en el nuevo Ejecutivo.
No obstante, y tras la dimisión en junio del bloque parlamentario saderita por el atasco de las negociaciones, el grupo proiraní decidió dar un paso delante y presentar como candidato al ex ministro de Trabajo y Asuntos Sociales.
Irak ya atraviesa su periodo más largo de negociaciones de Gobierno desde las primeras elecciones celebradas en 2005 bajo los auspicios de Estados Unidos; una situación que ha llevado tanto a la población como a la clase política del país a un estado de frustración permanente e impedido al el segundo mayor productor de petróleo de la OPEP que extraiga los beneficios correspondientes del aumento de los precios del crudo.
El primer ministro iraquí llama al diálogo
El primer ministro de Irak, Mostafá al Kazemi, ha comparecido este sábado de urgencia ante la nación para exigir a las fuerzas políticas iraquíes que pongan inmediatamente en marcha un diálogo político para reanudar las paralizadas conversaciones de gobierno en medio de un nuevo día de caos en Bagdad. “Los bloques políticos deben sentarse, negociar y llegar a un entendimiento por el bien de Irak y los iraquíes, y se debe evitar el lenguaje de la traición y la exclusión, y se debe mostrar un espíritu patriótico alto e inclusivo“, ha declarado Al Kazemi. Además, ha anunciado la suspensión de todas las sesiones hasta nuevo aviso.