La activista iraní Narges Mohammadi ha sido distinguida con el Premio Nobel de la Paz 2023 en reconocimiento a su incansable lucha por los derechos humanos en Irán, especialmente en lo que respecta a la opresión de las mujeres en el país y su constante batalla por promover la libertad y la justicia para todos los ciudadanos. El lema “Zan. Zengedi. Azadi (Mujer. Vida. Libertad)” encarna la resistencia de las mujeres iraníes contra el régimen de los ayatolás.
Narges Mohammadi es una destacada activista de derechos humanos y periodista iraní que ha dedicado su vida a la defensa de los derechos de la mujer y la abolición de la pena de muerte en su país. A lo largo de su trayectoria, ha enfrentado periodos de prisión en Irán debido a acusaciones que incluyen la difusión de “propaganda contra el Estado”. Su detención y situación legal han sido objeto de condena a nivel internacional.
Berit Reis-Anderssen, presidenta del Comité del Nobel de la Paz, ha expresado su esperanza de que las autoridades iraníes liberen a Narges Mohammadi antes de la ceremonia de entrega del premio, que está programada para el 10 de diciembre. Esta fecha coincide con el 75º aniversario de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Narges Mohammadi también ocupa el cargo de subdirectora en el Centro de Defensores de los Derechos Humanos, organización dirigida por Shirin Ebadi, ganadora del Premio Nobel de la Paz en 2003. Además, Mohammadi fue elegida Presidenta del Comité Ejecutivo del Consejo Nacional de la Paz de Irán.
El 16 de septiembre de 2022, Mahsa Amini, una joven que había sido arrestada por no llevar adecuadamente el velo, falleció en prisión, convirtiéndose en un símbolo de la resistencia bajo el lema Mujer. Vida. Libertad. Narges Mohammadi expresó su preocupación por este trágico suceso y la represión de las protestas en una carta que fue difundida por la cadena de televisión ARTE. En esa carta, Mohammadi instó a no permanecer en silencio ante la crueldad y abogó por un cambio hacia un gobierno secular basado en los derechos humanos y la democracia en Irán.
El pasado domingo, otra joven llamada Armita Garawand fue agredida por no llevar velo por la policía de la moral en Teherán mientras viajaba en el metro. El grupo de derechos humanos Hengaw denunció este incidente, y la joven se encuentra en coma en el hospital Fajr bajo custodia policial. Las declaraciones del régimen iraní, que sugieren que sufrió un desmayo, han sido cuestionadas por amigos y familiares.
Narges Mohammadi ha denunciado el comportamiento del gobierno y su intento de ocultar la verdad en sus redes sociales, destacando la importancia de revelar la verdad en medio de la opresión.
Henrik Urdal, director del Instituto de Investigación para la Paz de Oslo (PRIO), ha subrayado que el reconocimiento a Narges Mohammadi es un logro significativo para los derechos de la mujer en Irán. Urdal enfatizó que las mujeres iraníes han luchado durante generaciones por la igualdad y la libertad, y que el galardón envía un mensaje poderoso a los líderes de Irán sobre la importancia de los derechos de la mujer en todo el mundo.