La Policía del Capitolio se vio obligada a evacuar uno de los edificios de oficinas del Senado de Estados Unidos tras recibir una llamada telefónica que alertaba sobre un posible tirador activo en la zona. Sin embargo, después de un exhaustivo operativo, se confirmó que todo había sido una falsa alarma.
“Nuestros agentes están rastreando tanto el interior como los alrededores de los edificios de oficinas del Senado”, informó inicialmente la Policía del Capitolio a través de la red social X (anteriormente conocida como Twitter).
El jefe de Policía del Capitolio, Thomas Manger, más tarde confirmó que no se encontró “nada preocupante” durante el operativo. “No se reportaron disparos y afortunadamente no hay heridos”, aseguró.
El edificio Russell fue evacuado y el acceso a los túneles subterráneos fue restringido, mientras que el edificio principal del Senado permaneció abierto. Las autoridades también advirtieron a la población que se mantuviera alejada del área durante la operación.
Previamente, los trabajadores del Congreso habían recibido instrucciones de seguridad, como cerrar puertas y buscar refugio, ante la potencial amenaza. La cadena NBC News fue la encargada de informar sobre las medidas de precaución tomadas.
El incidente se produjo en un momento delicado, coincidiendo con la citación del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump (2017-2021), quien debía comparecer ante una jueza en Washington DC este jueves. Los cargos imputados están relacionados con presuntos intentos de revertir el resultado de las elecciones presidenciales de 2020, que culminaron en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.
En esa fecha, una turba de seguidores de Trump irrumpió en la sede del Congreso mientras se celebraba una sesión conjunta para confirmar la victoria del demócrata Joe Biden en los comicios de noviembre de 2020, derrotando al entonces mandatario republicano.
La comparecencia del expresidente ante la magistrada Moxila Upadhyaya en el tribunal federal del distrito de Columbia estaba programada para las 16:00 horas (20:00 GMT), en la capital de Estados Unidos, en lo que representa la tercera imputación para Donald Trump.
Con estos acontecimientos en el centro de la atención mediática, las autoridades se mantienen alerta y vigilantes ante cualquier señal de peligro en la sede del poder legislativo estadounidense.