Este viernes por la noche se suspendió el debate electoral entre los candidatos a la Asamblea Regional de Murcia, ya que María Marín, cabeza de lista de Podemos, se negó a abandonar el plató y compartir tiempo televisivo con su homóloga de Más Región-Equo, Helena Vidal, como lo había establecido la Junta Electoral.
La Junta Electoral emitió una resolución, que aún está pendiente de resolución después de que el partido morado presentara un recurso ante la Junta Electoral Central, en la que se ordenaba que en la primera parte del debate participara un único representante de Podemos-Izquierda Unida-Alianza Verde, y en la segunda parte, el de Más Región-Verdes-Equo. Esto se debía a que tener a ambos candidatos «supondría que la coalición menos votada en mayo de 2019 tendría a dos representantes», mientras que el resto de partidos solo tendrían uno.
La cancelación ocurrió durante el tercer bloque, que trataba sobre política social, cuando la candidata de Podemos se negó a abandonar el plató para dar paso a la cabeza de lista de Más Región.
A pesar de los intentos de los presentadores de persuadir a María Marín para que cumpliera con lo establecido, el debate se interrumpió momentáneamente y, después de media hora, se decidió cancelarlo para cumplir con lo dispuesto por la Junta Electoral Provincial.
Tras el debate, Fernando López Miras, presidente regional y candidato a la reelección por el PP, lamentó la estrategia de Podemos y enfatizó que la comunidad necesita «solvencia, seriedad y un buen gobierno, y no circos ni extremismos».
Cuando se le preguntó si estaría dispuesto a retomar el debate en otro momento, López Miras expresó su disposición a debatir, pero reconoció la dificultad de coordinar las agendas de todos los candidatos a tan solo una semana de las elecciones.
José Vélez, secretario general del PSOE murciano y cabeza de lista, afirmó que las normas deben respetarse y aunque respeta la decisión de la Junta Electoral, no la comparte. Además, instó a que se celebre un nuevo debate antes del 28 de mayo.
María José Ros, cabeza de lista de Ciudadanos, consideró «bochornoso» el comportamiento de María Marín y mencionó que le hizo un favor a López Miras, quien no quería debatir. Por su parte, José Ángel Antelo, líder de Vox en la comunidad y candidato a presidente, opinó que los hechos eran muy graves, ya que no respetaban la democracia ni la decisión de la Junta Electoral, y afirmó que era necesario expulsar a esta gente de todas las instituciones como mensaje claro a la ciudadanía.