El pasado viernes se presentó en Madrid la candidatura a la dirección de Ciudadanos #RenaceTuPartido. Había mucha expectación por saber quienes formarían parte de la candidatura de consenso tras días de especulaciones.
Os diré que seguir la rueda de prensa que hicieron y ver quienes la conformaban, pendientes de nuevas incorporaciones, ha sido uno de esos momentos que voy a guardar en mi memoria como históricos dentro de Ciudadanos.
A nadie se le escapa que estamos atravesando una situación complicada. Una situación que, no nos engañemos, no es resultado de los llamados errores de los últimos años. Que se han cometido errores es obvio, pero no más ni más importantes que los que se cometieron antes de noviembre de 2019. Todos han sido, básicamente, de estrategia. Aunque no es nuevo quiero repetirlo aquí, ningún error de Ciudadanos merecería atención de los medios de comunicación si no fuera porque molestamos. Lo dijo Carrizosa en una entrevista en Tv3 y acertó de pleno. Ciudadanos molesta a derecha y a izquierda, molesta al bipartidismo que lleva toda la democracia utilizando las instituciones como sus cortijos particulares y que, tras los resultados que obtuvimos en abril del 19 dejamos de ser un partido simpático a convertirnos en el enemigo público número uno para el statu quo. Y había que abatirlo, hay que abatirlo para que PP y PSOE puedan seguir dirigiendo España desde sus intereses partidistas y no desde el bien común para todos los españoles.
“Somos muchos los que entre la sorpresa, la decepción y el enfado, asistimos a la destrucción del trabajo realizado durante los meses anteriores, con la Refundación“
Que Ciudadanos, un partido liberal nacido en la sociedad civil y conformado por personas que nunca antes pensaron entrar en política, es necesario en España. Es imprescindible. Y no es por la pasión que puedo sentir por este proyecto sino por el bien de España. Y más en estos momentos en los que el PSOE ha dejado de ser lo que sus siglas significan, al convertirse en un partido populista más, que prefiere pactar con golpistas y filoetarras que pretenden romper nuestro país, que con los que frenamos el golpe en Cataluña en el 17. Y con un PP bajo la dirección de un lobo con piel de cordero que pretende extender el caciquismo imperante en Galicia al resto de España y, para ello, pactará con los nacionalistas vascos y catalanes, porque sigue siendo el PP de siempre.
Os confesaré que estaba preocupada por la continuidad de Ciudadanos cuando, hace un par de semanas, volvimos a ocupar los titulares de prensa en negativo. Somos muchos los que entre la sorpresa, la decepción y el enfado, asistimos a la destrucción del trabajo realizado durante los meses anteriores, con la Refundación. Porque el trabajo no fue sólo de cientos de reuniones, incluso en agosto, de los grupos de trabajo de afiliados voluntarios o del recorrer España para llevar a cabo un proceso de escucha activa nunca visto. El trabajo fue también conseguir que los medios de comunicación nos trataran mejor, que las noticias sobre Cs fueran en positivo, y eso fue lo que se cayó cual castillo de naipes hace un par de semanas.
“Quiero un partido con Nacho Martín Blanco, Carlos Carrizosa y Joan García que, doy fe de ello, se parten la espalda cada día trabajando para la afiliación”
Y de ahí la expectación por la candidatura de consenso. Y llegó el día de conocerla y, sin exagerar, fue un volver a coger aire como cuando se decretó el 155 en Cataluña. Porque nos jugamos mucho, nos jugamos ser el partido que frene los delirios del bipartidismo, el muro de contención de nacionalismos y populismos que, sin nosotros, camparían a sus anchas. Debemos ser ese partido que haga ver a los ciudadanos que otra forma de hacer política es posible, que somos ellos en las instituciones, que somos su voz y que la política no es repartirse sillones sino promover el bien común. La política es gestionar lo público con el objetivo de ofrecer a la ciudadanía una vida mejor, más libre, más digna y no imponer la ideología de turno denostando todo lo que hicieron otros.
Algunos sólo hablan de “caras nuevas”, como si las caras fueran el contenido. Y, que queréis que os diga, yo prefiero contenidos, compromiso, trabajo, preparación, vocación y experiencia por encima del quien. Y así veo a Adrián Vázquez, que ha realizado un espectacular trabajo en Europa y que desde la Comisión de Justicia ha impedido que los golpistas se pasearan por la UE destruyendo las instituciones. Un Adrián Vázquez que lo ha dado todo en el proceso de Refundación, recorriéndose España escuchando a los afiliados. Y doy fe que les escuchaba y debatía con ellos. O Patricia Guasp, que robándole tiempo a su familia, ha dedicado los últimos meses a estar con los afiliados, a recoger sus inquietudes y propuestas y a volcarlas en unas conclusiones que conformarán el futuro proyecto de Ciudadanos. Quiero, para este partido, esa positividad, ese trabajo constante, ese a pie de calle frente a la negatividad, a enfrentamientos y ese andar por los medios despreciando a compañeros que nada aporta y que solo destruye.
Quiero un partido con Nacho Martín Blanco, Carlos Carrizosa y Joan García que, doy fe de ello, se parten la espalda cada día trabajando para la afiliación. Nadie ha hecho tantas carpas, ni recorrido tanto territorio, ni trabajado para mantener la unión como ellos. Ciutadans nació en Cataluña con aquel “ha nacido tu partido” y será, con la fuerza de los guerreros catalanes que pararon un golpe de Estado, que Ciudadanos renacerá.
Y quiero a Guillermo Díaz, no sólo porque es el azote de los separatistas en el Congreso, que también, sino porque es un valor imprescindible que siempre está para escuchar y ayudar. Y María José Ros, que está levantando la Región de Murcia con un trabajo excepcional, en positivo. Y Carlos Pérez Nievas y Mariano Fuentes y Eva Poptcheva y jóvenes y veteranos. Y con Villacís, de indudable solvencia como vicealcaldesa de Madrid y siempre disponible para sus afiliados. Y, como no, con Inés Arrimadas, uno de los mayores activos políticos con los que contamos. Sólo hay que ver como ha sido capaz de erigirse en la oposición de Sánchez en el Congreso en estas últimas semanas ante la deriva antidemocrática del Gobierno. Hasta esos medios que habitualmente tienen a Ciudadanos como objetivo a destruir, no han podido evitar señalarla como “la verdadera oposición” a Sánchez. Nadie, que quiera el bien para Ciudadanos y para España, puede pretender relegar a Inés. Y, porque no todo el mundo tendría la generosidad de Inés de dar un paso al lado de la Presidencia y pasar a cerrar una lista.
Así que sí, con estos valores y los que se unirán en los próximos días y con la ilusión y trabajo de muchos, #RenaceTuPartido es, sin duda alguna, el futuro de Ciudadanos.