El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este jueves la presentación de forma inmediata en el Congreso de una proposición de ley para reemplazar el delito de sedición por otro delito de «desórdenes públicos agravados» y con penas más bajas.
Sánchez, en una entrevista en La Sexta, ha avanzado que esa proposición será presentada este viernes por el grupo socialista y de Unidas Podemos en el registro de la Cámara baja.
El jefe del Ejecutivo ha defendido las decisiones «valientes y audaces» que ha ido adoptando para rebajar la tensión en Cataluña, y en ese contexto ha justificado la proposición de ley que se presentará este viernes para homologar el Código Penal, ha dicho, a las principales democracias europeas.
El delito de sedición, que ha recordado que fue redactado en 1822, será modificado y pasará a denominarse de «desórdenes públicos agravados», lo que considera «un paso definitivo» para la modernización de estos tipos delictivos.
Sánchez ha negado que esta decisión sea una exigencia de ERC para aprobar los presupuestos generales del Estado y ha recordado que hasta ahora no había mayoría parlamentaria suficiente para que saliera adelante la reforma.
Pero en las últimas semanas ha dicho que ha visto que varios grupos han mostrado su disposición a esa modificación del delito de sedición.
Ha asegurado que la amnistía que pide el independentismo no va a ser aceptada por el Gobierno y que con esta reforma el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont tendrá que seguir rindiendo cuentas ante la Justicia española.
«Los delitos de 2017 siguen estando presentes en el Código Penal, no como delito de sedición, sino en una nueva tipología de delito», ha recalcado.