Las formaciones independentistas del Congreso consideran que, tras la comparecencia de la directora del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Paz Esteban, en la Comisión de Gastos Reservados, es aún más pertinente que el Congreso abra una investigación sobre el espionaje político a independentistas y, además, han exigido que se desclasifiquen los documentos que la jefa de los espías ha enseñado a los diputados con acceso a secretos oficiales.
En declaraciones a los medios tras asistir a esa comparecencia a puerta cerrada, todos han evidenciado su insatisfacción por las explicaciones obtenidas y la mayoría ha dejado patente su indignación al considerar probado el espionaje «político» a personas no por sus actos, sino por sus ideas.
Así, desde ERC han anunciado que registrarán una petición de comisión de investigación para que el Congreso abra pesquisas sobre este asunto y tanto Junts como la CUP han pedido que se desclasifiquen los documentos que les ha mostrado Esteban.
Intranquilo como demócrata
El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha confesado que se encontraba «tan intranquilo como demócrata» como antes de escuchar a la directora del CNI porque, a su juicio, este jueves «se ha justificado que se espió a independentistas porque intentaban implementar sus ideas rompiendo el marco constitucional o legal».
«Yo he puesto el ejemplo del vicepresidente de Vox en Castilla y León (Juan José Gallardo) cuyo principal objetivo es cargarse la autonomía, lo que va en contra del marco constitucional, y estoy convencido de que a él nadie le va a espiar«, ha relatado.
De su lado, la portavoz de Junts, Miriam Nogueras, ha señalado que las explicaciones de Esteban la han «enfadado» porque se ha confirmado que ha habido un «espionaje masivo» a independentistas.
Alegando que la ley le impide revelar qué se ha tratado en la reunión, Nogueras ha rehusado especificar cuántos independentistas han sido investigados con aval del Supremo ni si entre ellos está ella misma. En cualquier caso, en otro momento sí ha destacado que su móvil sí ha sido infectado con ‘Pegasus’.
Espionaje sin límite ni garantías
«Yo, como independentista no me puedo quedar en absoluto tranquilo de la información de la que he sido conocedor», ha confesado el diputado de la CUP, Albert Botran, otro de los espiados según ‘The Citizen Lab’, y que también ha evitado comentar si la directora del CNI había hablado de su caso particular.
Sí se ha quejado de que «no se ha dado ninguna explicación» que «de lejos» sirva para cerrar este «escándalo de espionaje político» porque no han obtenido «ninguna garantía» de que «no se haya espiado 65 independentistas» lo que, ha denunciado, deja a todo el colectivo en una situación de «gran indefensión».
Su conclusión es que como una de las misiones del CNI es la defensa de la integridad del España eso «le permite espiar a miembros del movimiento independentista prácticamente sin límite y sin garantías» y «perseguir a gente por razón de sus ideas, que no se sus acciones». Y todo ello sin que puedan recurrir a ningún organismo administrativo para saber si están siendo espiados.
Además, ha acusado al PSOE de ser «cómplice» por encubrimiento del espionaje que haya podido llevar a cabo el CNI, puesto que como partido en el Gobierno «es conocedor de todas las misiones y objetivos» del centro.
PNV: «Queda tela por cortar»
Por su parte, la portavoz de Bildu, Mertxe Aizpurua, ha comentado a los medios que salía de la comisión con muchas «incógnitas» y convencida de que hay «muchas cosas que aclarar«. Es más, ha afirmado a la salida de la sesión que la comisión de investigación sobre Pegasus «sigue siendo necesaria».
«Pocas sorpresas la verdad. Todas aquellas sorpresas que decía la ministra de Defensa que nos íbamos a encontrar brillan por su ausencia», ha remachado.
«Sólo diré que queda tela por cortar», se ha limitado a señalar al término de la comisión el portavoz del PNV, Aitor Esteban, quien ha recordado que nunca ha hablado a los medios sobre el contenido de la Comisión de Gastos Reservados y que iba a empezar a hacerlo ahora.