El pasado martes, después de un largo y arduo proceso de negociación que involucró al Gobierno, sindicatos y empresarios, se aprobó la reforma de las pensiones en España. Esta reforma, que se ha considerado como una de las más importantes de los últimos años, implicará un cambio significativo en la forma en que se calculan las pensiones de los trabajadores en el país. En concreto, se aumentará el período que se tiene en cuenta para el cálculo de la pensión hasta los 29 años, permitiendo descartar los 24 peores meses. Sin embargo, este cambio no se implementará de forma inmediata, sino que se llevará a cabo de forma progresiva a lo largo de los próximos años, hasta culminar en 2044.
Este nuevo método de cálculo de la pensión, denominado «dual» por el Gobierno, funcionará solo durante un período transitorio, hasta que se alarguen los años que se tienen en cuenta para obtener qué pensión debe recibir un trabajador al final de su vida laboral. En la actualidad, los nuevos pensionistas tienen la opción de elegir entre calcular su pensión en base a los 25 últimos años de su carrera o los 29 últimos, descartando los 24 peores meses. Sin embargo, cuando se alcance el período completo de 29 años de cálculo en 2044, los nuevos pensionistas ya no podrán elegir entre estos dos métodos y se tendrán en cuenta los últimos 29 años de su carrera, con la eliminación de los 24 peores meses.
Es importante señalar que esta reforma de las pensiones ha generado mucha controversia en España, especialmente en el ámbito político. Cuando se inició la negociación de esta última parte de la reforma de las pensiones, la propuesta del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones era aumentar el período de cálculo hasta los 30 años, permitiendo al trabajador quedarse con los 28 mejores. Sin embargo, esta medida fue rechazada por la parte morada del Gobierno, liderada por la vicepresidenta y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, quien argumentó que esto endurecería el acceso a la jubilación y reduciría las pensiones de parte de los futuros pensionistas, especialmente aquellos que habían desarrollado carreras más lineales.
Finalmente, Unidas Podemos logró convencer al ministro Escrivá para que diera marcha atrás en su propuesta inicial y se estableciera un período de cálculo de 29 años con la eliminación de los 24 peores meses. No obstante, esta medida se implementará de forma progresiva y no inmediata, lo que ha llevado a algunos expertos a pensar que la reforma se ha pensado más en términos electorales que en necesidades reales del sistema. A pesar de esto, tanto los sindicatos UGT y CCOO como el Gobierno han mostrado su satisfacción con el acuerdo alcanzado, destacando que la reforma debe contar con los apoyos suficientes en el Congreso para ser aprobada y evitar situaciones como las que ocurrieron con la reforma laboral.