El concejal de VOX en el Ayuntamiento de Barcelona, Gonzalo de Oro, ha expresado su descontento por haber recibido el proyecto de ordenanzas fiscales de la ciudad para el año 2025 con apenas una hora y media de antelación antes de la votación inicial en la Comisión de Economía. De Oro ha criticado duramente al gobierno municipal, liderado por el alcalde Jaume Collboni (PSC), calificando la situación como una falta de seriedad y respeto hacia su grupo y los casi 40.000 barceloneses que votaron a su formación en las últimas elecciones municipales de 2023.
El concejal de VOX ha señalado que este escaso margen de tiempo impide un análisis detallado de las propuestas. “Desde VOX exigimos seriedad y respeto al gobierno municipal, no puede ser que nos envíen el documento de Ordenanzas Fiscales unas horas antes de empezar la Comisión de Economía”, afirmó de Oro durante la Comisión.
En relación al contenido de las ordenanzas fiscales, VOX ha decidido votar en contra, alegando que las medidas previstas suponen un incremento de impuestos que, a su juicio, no beneficia a las familias trabajadoras ni a los sectores productivos. De Oro ha sido especialmente crítico con la subida del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) que afecta a restaurantes, hoteles y locales de ocio, así como con el aumento de la tasa de residuos, que prevé un incremento del 47% en los próximos tres años.
El concejal ha manifestado que “las OOFF de Collboni son un desastre, todos son subidas de impuestos que no contemplan ninguna rebaja para las familias”. Desde VOX también han cuestionado la falta de incentivos fiscales para los pequeños empresarios y las familias, al tiempo que denuncian que se sigue destinando dinero público a lo que el partido denomina “chiringuitos afines” al gobierno.
De Oro ha asegurado que el equipo de gobierno del PSC, con el apoyo de ERC y Barcelona en Comú, prioriza el aumento de la presión fiscal sobre la clase trabajadora y las empresas que generan empleo en la ciudad, en lugar de ofrecerles facilidades. “Suben el IBI a aquellos que generan puestos de trabajo: comercios, terrazas y hoteles”, declaró el concejal. También añadió que “la filosofía de estas ordenanzas es machacar a la clase trabajadora, mientras se premia a los que no cumplen nunca”.
Finalmente, de Oro calificó las ordenanzas fiscales de 2025 como una herramienta que resume la política del gobierno municipal en tres palabras: “prohibir, multar y subir impuestos”. Por su parte, el Ayuntamiento ha defendido que las medidas son necesarias para garantizar la financiación de los servicios públicos y mejorar la sostenibilidad de la ciudad, aunque las críticas de VOX y otros sectores de la oposición anticipan un debate intenso en las próximas semanas.
